En su edición de este domingo, el matutino La Nación se permitió un pecadillo con la firma de Beatriz Sarlo. Se estaba en veda política, todavía no se conocía el aluvión de votos y la que lograra legítimo prestigio académico como profesora de literatura argentina en la UBA y últimamente todas las iras de los adocenados intelectuales oficiales, acantonados en la Biblioteca Nacional, donde por supuesto no pagan ni la luz, deslizó lo que podría ser un poco de propagandita electoral, pero sobre todo lo que parecen ser sus preferencias políticas. La columna, como siempre, tiene lo suyo y vale la pena leerla. Para los que siguen siendo amantes de la visualización una interesante reflexión sobre aquellas Villas Miserias y estas que disfrutamos ahora. Ver.
lunes, 15 de agosto de 2011
¿QUIEN DIJO VEDA?
En su edición de este domingo, el matutino La Nación se permitió un pecadillo con la firma de Beatriz Sarlo. Se estaba en veda política, todavía no se conocía el aluvión de votos y la que lograra legítimo prestigio académico como profesora de literatura argentina en la UBA y últimamente todas las iras de los adocenados intelectuales oficiales, acantonados en la Biblioteca Nacional, donde por supuesto no pagan ni la luz, deslizó lo que podría ser un poco de propagandita electoral, pero sobre todo lo que parecen ser sus preferencias políticas. La columna, como siempre, tiene lo suyo y vale la pena leerla. Para los que siguen siendo amantes de la visualización una interesante reflexión sobre aquellas Villas Miserias y estas que disfrutamos ahora. Ver.