Anoche, en el estado mundialista Malvinas Argentinas de Mendoza, el todavĂa flamante descendido River Plate le hizo 3 al local Independiente Rivadavia que preside el multimediático de su presidente Daniel Vila. La inconsistente noticia deportiva no dejarĂa de ser eso si el sector norte de las instalaciones no se ubicaron ubicado unos 12 mil gallinas, quienes abonaron en tal condiciĂłn un 50% más la entrada, la mayorĂa de ellos llegados en micros especiales, kombis, autos, aviones y demás, amĂ©n de la parcialidad millonaria local. La noticia, entonces, estriba en que desde hace 4 años en la divisional que acaban de estrenar por mĂ©ritos propios el club (dicen) con mayor cantidad de socios del mundo los hinchas visitantes tienen prohibida la entrada.Vila está haciendo toda la campaña para ocupar el lugar desde octubre prĂłximo del califa Julio Humberto Grondona, quien ya lleva tres dĂ©cadas en el cargo y este año parecen habĂ©rseles caĂdos todos encima. AsĂ que como la Argentina es un paĂs donde las normas están para violarlas, no para cumplirlas, a Vila se le ocurriĂł:
- no se trata de hinchas visitantes, sino de pĂşblico neutral (sic)
- la disposiciĂłn viene del CoProSeDe, un ente porteño sin jurisdicciĂłn sobre los estados pretendidamente federales como serĂa el caso de Mendoza
- esto ya está conversado y se trata de River, no de Sportivo Pedal de San Rafael.